El movimiento en las ciudades y el contagio

Por un lado, moverse en la ciudad es una necesidad de las personas para realizar sus actividades cotidianas, entre ellas las laborales y educativas, que destacan por su mayor frecuencia y tiempo de desplazamiento, así como las de carácter personal, como acudir al médico o realizar las compras de abasto semanal. Por otro, nos permite relacionarnos con nuestra familia y amigos, recorrer nuestro barrio o colonia, saludar a nuestros vecinos y fomentar nuestras relaciones comunitarias, es decir, es una actividad que permite al ser humano ejercer su capacidad como ser social. Por lo tanto, desplazarse en la ciudad está estrechamente ligado con nuestro derecho a vivir y disfrutar de la ciudad como ámbito y nicho de conservación de nuestra especie.

De acuerdo con el estudio que realizamos en el Instituto de Investigación y Estudio de las Ciudades (in-Ciudades) de la Universidad de Guadalajara,[1] a partir de la emergencia sanitaria que se generó en la escala global en las ciudades por la pandemia por covid-19, se pudo observar en el área metropolitana de Guadalajara una relación entre el aumento del número de contagios (Secretaría de Salud y Radar Jalisco) con el aumento de los desplazamientos, estos últimos revisados en las plataformas Google Maps, Apple y Waze que hicieron pública su información.

También se identificó que una importante cantidad de los desplazamientos laborales y educativos de la población se realizan en un municipio diferente al de residencia, lo cual significa que deben utilizar medios motorizados y también que pueden llevar el contagio de su municipio laboral al de residencia y viceversa, lo que ha generado una mayor dispersión del virus SARS-CoV-2.

La forma en la que realizamos nuestros desplazamientos depende de la distancia a nuestros destinos y de las opciones de transporte que tenemos. Los dos temas son relevantes en la actual emergencia sanitaria, ya que si nuestros destinos son lejanos debemos utilizar el automóvil, motocicleta o el transporte público, y este último es el que tiene mayor riesgo de contagio, pues las unidades no son sanitizadas en cada viaje, la capacidad de las unidades no permite mantener la sana distancia y una cantidad importante de personas no sigue las medidas de higiene solicitadas por las autoridades.

Así, moverse en la ciudad ha requerido repensar cómo desplazarnos para tomar los menores riesgos de contagio posibles sin perder nuestro derecho al uso de la ciudad y, en definitiva, en la actual emergencia sanitaria los desplazamientos a pie y en bicicleta son los más seguros si asumimos la responsabilidad de cumplir con los lineamientos de higiene establecidos por las autoridades de salud.

Invitamos a consultar el tablero público covid–19 del proyecto en el sitio: http://covid19.inciudades.cuaad.udg.mx/

 

[1] Modelo predictivo de la difusión intermunicipal de la pandemia covid-19 en Jalisco a partir de los flujos de movilidad ocupacional (laboral y estudiantil), de la Universidad de Guadalajara, in–Ciudades y el Consejo Estatal de Ciencia y Tecnología del Estado de Jalisco; los autores son los responsables del proyecto.