Ante la problemática de las niñas y los niños en situación de calle, desde 1988 el Movimiento de Apoyo a Menores Abandonados (MAMA, AC) atiende a esta población en Guadalajara, Jalisco, México. Alfredo Castellanos, director de Programas, nos explica parte del quehacer de la organización.
¿Cómo es la problemática de los niños en situación de calle en la ciudad de Guadalajara?
El fenómeno se ha tratado de invisibilizar. Tanto por operativos de las autoridades, que los recogen y llevan a instituciones privadas o públicas, como por las estrategias de los niños, que ya no duermen en la calle sino en baldíos o casas abandonadas. Pero el problema es el mismo: violencia, adicciones, prostitución, sexualidad riesgosa, mendicidad, enfermedades, abandono y desesperanza. Es una realidad muy compleja y peligrosa para los niños.
¿Existen zonas con más concentración de niños en situación de calle?
Históricamente había más en el centro de la ciudad, pero de hace tres años [2015] para acá las autoridades de Guadalajara aplicaron un programa de ordenamiento del primer cuadro de la ciudad. Tanto niños trabajadores como niños que viven en la calle se dispersaron. Esto invisibiliza el tamaño del problema, pues impide tener un censo confiable y evita que tanto autoridades como asociaciones civiles focalicen los servicios para esta población.
¿Cuál ha sido el papel de las autoridades?
El estado está haciendo su papel, pero tiene retos. El problema de los gobiernos es que actúan por un tiempo definido. Quieren llegar a inventar el hilo negro. Hace falta una política de mediano y largo plazos y que trabajen de forma conjunta con las organizaciones de la sociedad civil, pues conocemos mejor la problemática.
¿Cuál es el papel de la sociedad?
Como comunidad tendríamos que involucrarnos, apoyar a las organizaciones que ya trabajan en esto, porque es un problema de nuestra infancia. Nosotros como sociedad civil tenemos pendiente incidir en las políticas públicas, en la formulación de leyes y de programas en favor de los niños. La idea no es tener cada vez más organizaciones como MAMA, AC. Tenemos que aspirar a que este tipo de organizaciones desaparezcan, pero cuando estemos seguros de que las niñas y los niños tienen garantizados sus derechos.
Luchador social que dedicó su vida a la atención de las niñas y los niños que mal viven y trabajan en las calles de Guadalajara. Fundó y operó durante casi 30 años MAMA, AC. Estableció programas a favor de madres adolescentes, mujeres indígenas y mestizas, mujeres solas y adultos en situación de calle. Fundó refugios, comedores, una escuela y un albergue. El mairo (maestro chido) será recordado como un padre por cientos de personas que gracias a él tienen una vida mejor. MAMA, AC, le sobrevive con un legado de amor, esperanza y lucha sin tregua por las niñas y los niños de la calle.[/box]
Susana del Real Ponce / Periodista y comunicadora pública